Entrevista a Aurelia Alejandra Lomas Cadeira
SEÑORES Y “SEÑORITOS”
Sí, sí. Y cuando decían…qué te voy a decir, yo la casa donde me casé y la otra cuando fui a servir a los chavales, no porque a los chavales no los tenía, pero ella tenía un hermano y decía “El señorito no sé qué” “El señorito…” ¡joder con el señorito de la porra! y luego donde estuve cuando me casé, a ella le llamaba por el nombre “Me ha dicho ella…” y él no quería que le llamara “el señorito”, “ni señor” ni nada, él por el nombre. Él era muy llano, él era…Porque entonces había un ascensor para el servicio y otro para subir nosotros ¿no? y muchas veces venía él de la calle o veníamos y nosotros veníamos y nos decía él “Subir por aquí qué más da nadie es más que nadie”. Él era muy muy llano